EL PADRE AUSENTE

 El padre ausente

El padre ausente es una situación que marca a un hijo en su proceso afectivo y de aprendizaje.

El padre no es una figura decorativa, y su intervención corrige algunos problemas de crianza. Así por ejemplo, cuando se trata de una madre sobreprotectora o dominante, la figura paterna para moderar el sometimiento del hijo a la madre es muy importante. El padre debe intervenir en pro de la libertad, para que la madre sobreprotectora no anule el carácter y el criterio del hijo o la hija. Un hijo sin carácter es un hijo sin criterio, que nunca va a madurar, ni va a tomar decisiones por sí mismo, sino está mamá o papá, que son en estos casos, los responsables de tomar las decisiones por él. El deber ser, es que los hijos adquieran madurez y tomen sus decisiones, y asuman las responsabilidades de esas decisiones.

Cuando la madre es muy permisiva y consentidora en cambio, el padre debe intervenir para el afianzamiento de los límites en el hijo, lo que Freud diría sobre el afianzamiento del superyó en el hijo, para que tenga autocontrol y principios que le permitan tomar decisiones responsables. Un hijo sin límites es un hijo problema, es decir, que tiende a meterse en problemas, pues no aprende de sus errores, y no tiene el criterio para corregir, y por eso tiende a volver a cometerlos.

Otro de los aspectos importantes relacionados con el tema del padre ausente, es la seguridad. Los hijos cuyos padres mienten para no estar con ellos, cuyos padres rompen fácilmente las promesas que les hacen, son niños inseguros y desconfiados. Si el padre, que es una de las figuras más importantes de su vida de niños, acostumbra a mentirles y a incumplir sus promesas, pues no es raro de que ese niño crezca con inseguridades y desconfianzas hacia los demás, y es un individuo que requiere que su entorno le esté reafirmando que no miente, así en las relaciones de pareja la falta de confianza infundada, le va a generar problemas si a toda hora se encuentra verificando que sí lo quiere, o que no lo engaña. En el tema laboral, puede generar problemas por pesimismo hacía la obtención de un trabajo, de un contrato o de su labor, y si es jefe, será una persona hostigante, que estará encima de los empleados verificando que todo se cumpla por la desconfianza  que tiene hacia las personas. Estas personas deben trabajar mucho el tema de la confianza, tratando de tratar de creer en las personas, y de comprender que se debe confiar en ellas, tanto como se pueda.

Otro tema, es el miedo al abandono. Los niños que han sufrido la separación de los padres, que experimentan que su padre por los problemas que tiene la madre, se aleja totalmente de él, sufre un dolor enorme, al creer o que es la causa por la cual su papá se fue, o al culpar a su madre de alejar a su papá. Esos temores los puede mantener durante su vida adulta, y pueden generarle el sentimiento exagerado de celos hacia su pareja, que les impide tener una relación sana. Sentir que una de las personas más importantes de tu vida te abandona, es un temor muy grande, y a veces, queda marcado en el subconsciente que solo reacciona instintivamente cuando se presenta una situación similar. Se debe trabajar mucho estos temas, pues los niños pueden asimilar como suyos los problemas de los padres y comportarse de manera errática, culpando a los padres o haciendo una sustitución de esos sentimientos negativos hacia sus parejas, a veces con razón (cuando la pareja es infiel) o a veces sin razón.