martes, 6 de julio de 2021

SI JOHN BULA FUERA ABOGADO.

 

SI JOHN BULA FUERA ABOGADO.

 

9 PM EN LA CASA BULA CARREÑO, SE TIENE UNA DISCUSIÓN DE VIDA O MUERTE.

 

John Bula: Joda Luu, Ay Luu

Luz Elena: Ajá John Bula… Ahora qué tienes.

John Bula: Me siento como inflamado la verdad, yo no me había sentido así antes.

Luz Elena: Joda John, si eso no es de ahora, es de toda la vida.

John Bula: Luu, es que siento un concierto para delinquir en mi estómago, siento que se reunieron José Escopeta, Alfonsito Cañón y el peor de todos… el Bombardero Iván René Valenciano.

Luz Elena: Mira John Bula, ni se te ocurra, porque te vas a dormir al sofá, yo que culpa tengo de que te hayas comido dos mangos, tres gelatinas, una sopa de mondogo y cuatro guineos antes de acostarte… me haces el favor… Echeeee

 

 

DE COMO JOHN BULA SALVÓ A PEDRO ALONSO DE UNA MULTA.

 

Eran las 4:30 de la tarde, en la camioneta conducida por Pedro Alonso, iba de regreso de una reunión familiar, e iban tarde pues el toque de queda en Puerto Colombia iniciaba a las 4:00 p.m., y preciso, un policía detuvo el carro, en el que iban:

Pedro Alonso

Cristina

Pedro Agustín.

Antonio.

El papá de Cristina

La mamá de Cristina

El hermano de Cristina

Bruno el Perro.

 

Los policías como siempre, bien dispuestos a dar raqueta, detuvieron el carro y pidieron todos los documentos de los tripulantes.

Pedro Alonso, ve la cosa complicada y llama a su cuñado Jhon Bula, prominente abogado:

Pedro Alonso: Jhon… tengo un problema, te necesito.

John Bula: Pedro… a mí no me vengas con maricadas ahora que no estoy de genio.

Pedro Alonso: No no no no, John escúchame, tengo un policía enfrente, necesito que %&%&/((

John Bula: Qué qué?

Pedro Alonso: Que (/())(///&&&%&%

John Bula: Nojoda, No te entiendo nada, pero ya voy para allá, mándame la dirección por WhatsApp.

Luz Elena: Qué Pasó?

John Bula: Aquí está tu hermano, que necesita que lo ayude, pero ya tiene la lengua enredada, no le entendí nada. Dile que me envíe la dirección para ir. Ah y dile que no hable con los policías.

Luz Elena: Ajá y si habla qué le van a entender…

 

Llega John Bula a la escena, y habla con Pedro, y después se dirige a los policías.

 

John Bula: Buenas tardes señor agente, cómo está? Yo soy el abogado del Dr. Pedro Alonso Carreño, mucho gusto, dígame ¿cuál es el problema?

Agente: Pues resulta que el señor está circulando en las calles y estamos en toque de queda.

John Bula: Pero señor agente, esto es un gran mal entendido. El señor Pedro Alonso es médico y está dirigiendo una misión humanitaria.

Agente: Pero abogado, el señor Pedro Alonso no me dijo nada de eso, es más no le pude entender.

John Bula: Se da cuenta señor agente, aquí no hay sino un mal entendido.

Agente: Aquí lo que veo es una gran familia que salió en grupo y no respetaron el horario del toque de queda.

John Bula: No señor agente, ya le explico:

El Dr. Pedro Alonso estaba en ejercicio de una misión humanitaria, el prestó su vehículo a la clínica del Caribe, para trasladar a una paciente de urgencias. Su vehículo en estos momentos está sirviendo como una ambulancia de emergencias, si quiere vamos y revisamos el baúl, va a encontrar botiquín, trajes para el covid, equipo médico… mírelo con sus propios ojos agente…

El agente revisó el baúl, y encontró muchos equipos médicos.

Usted ve a la señora mayor (señala a la madre de Cristina), esa señora está enferma, y la llevaban a la clínica. Mírela bien, ella está como asustada, como temerosa, y mire la cara de dolor. Si ella requiere que la lleven a un hospital.

Ve al señor mayor (señala al padre de Cristina) ese es el chofer. Mientras que el Dr. Pedro Alonso y la Dra Cristina atienden a la señora ese señor va conduciendo.

Agente: Pues sí puede ser.

Ve a la Dra Cristina, bueno, el señor Pedro Alonso es cardiólogo, y la Dra Cristina es internista, ambos estaban tratando al tiempo a la paciente, que está muy delicada, y usted los está reteniendo.

Agente: Pero y el otro joven (el hermano de Cristina) es odontólogo, qué tenía que ver en todo esto?

John Bula: Estamos en crisis, el odontólogo estaba sin trabajo, ahora está haciendo de paramédico, usted comprenderá este tema de la pandemia, ha cerrado todos los consultorios odontológicos, ese muchacho tiene que ganarse la vida con algo.

Angente: Pues sí tiene razón. Y bueno, esos otros dos (señala a Antonio y a Pedro Agustín).

John Bula: Esos dos muchachos son los camilleros. Ahí están prestándole apoyo al dr. Pedro Carreño, por si acaso la paciente se le desmaya, ahí están para trasladarla en una camilla.

Agente: Pero abogado, aquí tengo las cédulas de los jóvenes, y tienen el mismo apellido Carreño, y ambos tienen los mismos apellidos.

John Bula: Son meras coincidencias señor agente, los apellidos pueden coincidir, pero eso no significa que sean familia. Usted ve algún parecido entre el Dr. Pedro Carreño y alguno de los camilleros?

Agente: No, la verdad los veo y no se parecen.

John Bula: Usted ve algún parecido entre los dos camilleros? Mire, uno es alto, el otro bajito, mire las caras, son totalmente diferentes. Uno los ve y no pueden ser hermanos. Además señor agente, si usted quiere comprobar el parentesco entre varias personas tiene que hacerlo con los registros civiles, y no los tiene, así que todo esto no es más sino un mal entendido, como le dije desde el principio.

Agente: Pues sí, la verdad si parece una coincidencia porque no se parecen. Pero ahorita vi que la doctora, le dijo al Dr. Pedro Alonso mi amor.

John Bula: No señor agente, cómo se le ocurre. Son dos colegas que han trabajado juntos durante años, hay confianza, hay amistad, hay cariño. El Dr. Pedro Alonso podría ser el padre de Cristina, eso es imposible.

Agente: Y el perro?

John Bula: Es un perro rescatista, especialista en rescate mar y tierra, perfectamente entrenado.

Agente: Bueno… será dejarlos ir… dígales que me disculpen.

 

John Bula: Listo… nos podemos ir. Todo fue un mal entendido.

 

 

EL BETÚN, CULPABLE O INOCENTE.

 

Domingo 6:30 p.m.

 

John Bula: Betún buenas tardes, cómo estás?

Betún: Buenas tardes señor John.

John Bula: Betún, mañana necesito que llegues a primera hora a los Juzgados que tengo una diligencia muy importante.

Betún: Y primera hora es qué horas señor John?

John Bula: A la misma hora de siempre, a las 4:30 a.m.

Betún: Joda señor John, son casi tres horas y media antes de que abran los juzgados, a esa hora no ha llegado ni el portero. Es más, el hombre hasta me regaña porque piensa que le voy a quitar el trabajo. A esa hora, no se consigue ni un tinto. Hasta los atracadores están durmiendo a esa hora.

Jhon Bula: Betún, el que madruga Dios le ayuda, y nosotros tentemos que ser los primeros.

 

Llega Betún a la oficina a las 11 de la mañana todo emputado, y llega Enilse y le pregunta, ¿qué le pasó?

 

Betún: Joda qué pena con el señor John, hoy me han pasado unas cosas increíbles.

Resulta que hoy había un caso importante, y el señor John me dijo que hiciera la cola desde las 4:30 de la mañana, pues bueno, yo me presente como a las 4:50, pero igual, no había nadie. Como a las 7:30, llega el señor John, y me encuentra dormido en la puerta. Pero bueno, eso no es lo malo ni siquiera.

Me dice, Betún, esta audiencia no la podemos celebrar, el cliente me ha pedido que la aplace. Se veía como estresado. Luego se tomó un juguito como de níspero, y lo pidió con leche entera. Esto como que lo animó, porque me dijo que ya tenía la solución, que tenía un plan infalible.

Nos fuimos para el juzgado, teníamos que subir por el ascensor hasta el 9 piso de los juzgados, y cuando cogimos el ascensor, alguien se ha tirado un pedo Enilse, que ni para qué te cuento. El señor John mantuvo calma, como si nada pasara. Otras personas comenzaron a resoplar, a taparse la nariz, y mi jefe tranquilo. A mí me dio un ataque de risa, que la gente me miraba como si hubiese sido yo. Me miraban con desprecio, todos me odiaban, íbamos por el 5 piso, y todo el mundo se bajó. El jefe seguía como si nada, yo también pienso que él me echaría las culpas, porque yo no paraba de reírme, mientras que la gente que se bajaba me decía cochino. Yo no podía parar de reírme, qué vergüenza con el señor John.

Cuando llegamos al piso 9, yo estaba llorando de la risa, pero con una vergüenza con el señor John, que estaba callado y no me dijo nada.

Llegamos a la sala de audiencia, y estaba el abogado de la contraparte, su cliente, y como tres personas más que parecían ser los testigos. Nosotros entramos y nos sentamos al lado de ellos. Entró el juez y el secretario, y luego entraron dos personas más. De pronto se sintió un aire como caliente, y otro pedo hediondo. Enilse, tu no lo alcanzarías a imaginar. Y me ataca otra vez la risa, que se me escapa por la nariz. Esa risa nerviosa que uno no puede controlar. Yo me tapaba la boca, e igual se me escapaba la risa, yo que soy negro, me puse morado. Y de pronto, comenzaron los de la contraparte: Foooo, Nojoda. Ahí fue cuando más risa me dio.

El señor juez, se dirigió a mí, y me echó de la audiencia. Me dijo el señor John que el juez, al principio como sufría de rinitis, tenía la nariz tapada, y quería iniciar la audiencia, muy a pesar de que los abogados de la contraparte y su sequito le suplicaba que suspendiera la audiencia. Pero luego el juez dijo que negro para tener fuerza en el jopo, que de lo fuerte del pedo, se le había destapado la nariz, y que se le había tapado un oído, y que ordenó abrir todas la ventanas.

Joda Enilse, qué pena con el señor John… ese hombre mantuvo la calma, y no me dijo nada, qué decencia, ese hombre es todo un caballero.

Yo lo esperé afuera, y cuando cogimos el ascensor los abogados de la contraparte, la contraparte y los testigos, no quisieron entrar conmigo en el ascensor, y dijeron que esperaban. Seguimos bajando, y habían personas con las que habíamos subido y querían entrar en el ascensor, pero cuando me vieron, se paraban en seco, y lo dejaban pasar. Es más uno entró, y cuando me vio, se bajó en el siguiente piso, como si hubiese visto un fantasma

Y cuando salí de los juzgados, alguien de lejos me gritó viejo pedorro. Y ahí estaba el señor John como si nada, me dijo: “Joda Betún, todo salió a la perfección, gracias por tu ayuda”. Nojoda qué vergüenza con el jefe. En todo caso, el señor John me dijo que sabía que yo era inocente, y que fue un tal Alfonsito Cañón y un tal Iván René Valenciano, a los que él muy bien conocía, los culpables de todo ese lío.

Enilse: Y bueno, ¿dónde está el jefe ahora?

Betún: Me dijo que se le había presentado una emergencia familiar y que iba para su casa, que luego pasaba por la oficina. Ah y me dijo que te entregara esta nota para que se la escribieras a los clientes:

“Estimado Horacio, la audiencia fue aplazada según lo solicitado. Un grave problema de ventilación en el juzgado, propiciadas por una fuerza sobrenatural, impidieron que se celebrara la audiencia, muy a pesar de todos los esfuerzos humanos empeñados en realizarla. Con cariño John Bula”

Llegó John Bula a su casa…

Luz Elena: John mijo y tu ¿qué haces aquí?

Jhon Bula: Abran paso, que voy de prisa…

Luz Elena: Herminia, pilas, alerta roja… que John Bula se viene cagando…

 

 

 

EL HOMICIDIO PERRUNO

 

Jessica: Lo mataron, no hubo nada que hacer.

Sr. Manuel: Yo llegué y ya estaba muerto.

Jessica: Johanna estamos llamando a Jorge y no contesta. Es una urgencia. Mis suegros lo necesitan…

John Bula: Jorge, me llamó Manuel Calderón que tiene un caso de un homicidio, para ver si lo puedes atender… (Buzón de voz)

 

Sr. Manuel: Jorge cómo está? Lo mataron, esto es un caso penal… vengase ya.

Jorge: Dígame señor Manuel, en donde están?

Sr. Manuel: Estamos en la clínica veterinaria country, véngase inmediatamente. Yo estoy vestido de naranja fluorescente, como siempre, así me podrá ubicar.

Jorge: Listo señor Manuel, ya salgo para allá.

Llego al lugar de los hechos. En efecto me recibe el señor Manuel con su indumentaria naranja.

Sr Manuel: Jorge, lo mataron. No tuvo oportunidad, murió al instante.

Jorge: Y llamaron a la policía? ya hicieron el levantamiento medicina legal?

Sr. Manuel: La policía vio todo, es más nos van a servir de testigos.

Jorge: Y, ya identificaron a la víctima?

Sr. Manuel: Si, era Rayito.

Jorge: Rayito, … era su alias?

Sr. Manuel: No, era su nombre.

Jorge: Pero entonces era mujer?

Sr. Manuel: No, era macho, era un perro.

Jorge: Era mala gente entonces.

Sr. Manuel: No, rayito era muy noble, hacía todo lo que se le pedía, recibía los domicilios, daba los vueltos, atendía a las visitas… nooo era esplendido.  Mi mujer lo adoraba.

Jorge: Entonces usted sentía celos de él, por eso se refiere a el como un perro.

Sr. Manuel: No, yo no sentía celos de él, yo compartía su amor con mi esposa, desarrollamos una relación muy bonita. La verdad es que era para mí casi un hijo.

Jorge: Bueno… (cada quién con sus gustos pensé).

Sr. Manuel: Es más Jorge, cuando estuve solo en diciembre, Rayito fue mi compañía, yo hablaba con él, salíamos a pasear juntos y a veces dormíamos en el mismo cuarto.

Jorge: Ah caray¡ era como un compañero sentimental.

Sr. Manuel: Pero por supuesto, me ayudó entre tanta soledad. Y era la sensación entre las vecinas… Ay si rayito hubiese hablado, muchas cosas serían diferentes… pero bueno ya no puede.

En ese momento está la señora Aida asistida de su psicóloga, llorando, con Jessica a su lado. Jorge, lo mataron… lo mataron…

Jorge: Siento mucho su perdida, vamos a ver qué podemos hacer…

Aida: gracias Jorge.

 

Jorge: Pero señor Manuel, cómo lo puedo defender, si esto parece un crimen pasional: Alías Rayito tenía una relación con su esposa, usted lo consideraba como un hijo, pero lo trata de perro, pero al mismo tiempo es su confidente.

Sr. Manuel: Pero Jorge, usted de qué está hablando? Si rayito es un perro.

Jorge: Pues claro que es un perro, si lo engaña a usted con su mujer… pues…

Sr. Manuel: No Jorge, Rayito es el perro de mi mujer

Jorge: Bueno, es que también la engañaba a ella, con usted, según lo que entiendo.

Sr. Manuel: Pero de qué está hablando Jorge, si Rayito es un perro, un animal, por eso estamos aquí en la veterinaria.

Jorge: Y entonces porque me llamaron a mí, si yo soy abogado penalista, y me dijeron que había un homicidio.

Sr. Manuel: Si claro, es que mataron a Rayito, otro perro lo mordió, y lo zarandeó y murió inmediatamente. Mire a mi esposa, ha quedado muy mal, hemos tenido que llamar a la psicóloga, a la policía, a los bomberos, y Jessica dijo que lo llamáramos a usted.

Jorge: Bueno, no se qué estaría pensando Jessica, pero esto no es un homicidio.

Sr. Manuel: Bueno, la verdad lo que queremos es que la señora nos responda por el perro, ya dijo que iba a pagar la cremación de rayito, y que luego de eso que pongan las cenizas en una maceta con una planta. Y además ahora tiene que responder comprando otro perro, porque eso no se puede quedar así. Y no puede ser cualquier perro, porque Rayito tenía perigri.

Jorge: Ah bueno, ya esa es otra cosa, señor Manuel, la verdad ya me estaba preocupando el caso, pero sí voy a hablar con la dueña del perro a ver a qué acuerdo podemos llegar. La verdad, no soy abogado para estos temas, pero por ser familia lo voy a ayudar.

 

Jorge: Bueno señor Manuel, ya estuvimos visitando varias tiendas de mascotas, estuvimos cotizando los perros Yorkis, y están en un valor aproximado entre $2800000 y 25000000, pero dice la señora que les puede ofrecer un Schnauzer cachorrito que se lo acaban de regalar.

Sr. Manuel: No un Schnauzer, nooooo. Esa raza no le gusta a mi señora, además que tenemos varios familiares y amigos que tienen Schnauzer, y no la verdad es que es un perro muy complicado, precisamente conocemos una Snawzer que es de la suegra de mi hijo, y ha sido una mala experiencia, mi señora con una perra así, se vuelve loca. Nooo, nosotros queremos un Yorki, no cualquiera, y que tenga pedigri, y que quede claro que no aceptamos ningún Schnauzer.

 

Por otro lado,…

 

Jessica se dirigía a su vehículo, para irse a su casa cuando, fue abordada por el dueño de la tienda de mascota que se encontraba justo enfrente de donde ella había parqueado…

 Señor: ¿Señora qué le pasa? ¿por qué se parquea en ese parqueadero?

Jessica: Esto es un parqueadero público señor…

Señor: Ningún parqueadero público, usted es que es bruta, yo pago impuestos por él…

Jessica: Por qué no vienes y me lo dices acá cobarde… vienes a gritarle a una mujer…

Señor: ¿Qué va, usted no sabe lo que sufrimos los empresarios?

Jessica: Váyase a la mierda viejo maricón…  yo también tengo empresa (arrancó el carro y se fue)

…..

 

Johanna llama a Jessica por celular…

Johanna: Jessica, que fue lo que pasó y que armaste un escandalo en la veterinaria…

Jessica: Un hijodeputamalparido que me salió con groserías y qué por qué me había parqueado enfrente de su empresa…

Johanna: Jessica qué vergüenza, ya van a decir que yo no soy la única que arma escándalos en la vía pública… qué van a decir de la hija modelo de Luz Elena.

Jessica: Viejo malparido ese… me salió con groserías… disque él era un empresario que pagaba impuesto por el parqueadero, yo le dije que se fuera a la mierda que yo también tenía empresa.

Johanna: Y cómo te sentiste en tu primera pelea en público…

Jessica: Más bacano, yo creo que debería hacer esto más seguido, es hasta terapéutico.

 

 

 

CHARLAS DEL SEÑOR MANUEL CON MANOLITO.

 

Manolito: Abuelo, mi papá se baña todos los días en el camellón del río.

Sr. Manuel: Uy mijito, eso no puede ser eso es una cochinada.

Manolito: Si abuelo, mi papá se baña todos los días en el camellón del río.

 

Sr. Manuel: Manolo mijo, mira lo que está diciendo Manolito que tu te bañas todos los días en el camellón del río. No seas cochino Manolo.

Manolo: No papá cómo se te ocurre, estarás entendiendo mal, como siempre.

Sr. Manuel: Nooo, como se te ocurre, ya vas a ver. Manolito qué fue lo que tu me dijiste ahorita.

 

Manolito: Que mi papá se baña todos los días en el camellón del río.

Sr. Manuel: Viste Manolo: “Mi papá se baña todos los días en el camellón del río”

Manolo: No papá, el dijo: “Mi papá habla todos los días con John Alejandro mi tío.”

Sr. Manuel: Ah caramba, definitivamente yo no le entiendo a este muchacho.

 

 

 

UNA REUNIÓN MUY IMPORTANTE.

 

John Bula: John Alejandro tenemos hoy una fiesta de disfraces temático que está organizando la logia.

John Alejandro: Nojoda, esas reuniones son culo de hueso… Y hay que ir disfrazados?

John Bula: Sí tienes que preguntar de qué nos tocó, porque tenemos que ir, el señor Manuel, Manolo y tú, con el mismo atuendo, no podemos desentonar.

John Alejandro: Jajajajjaja ay papi, la verdad yo no voy a ir, culo de yarda la que nos tocó y yo no voy pa esa.

John Bula: Y por qué? De qué nos toco?

John Alejandro: Nojoda culo de difraz hijueputa, yo no se cómo vas a hacer tu y Manolo para una vaina de esa.

John Bula: Ajá John qué tan malo puede ser?

John Alejandro: Malo, reemalo, les tocó de torero.

John Bula: jueeputaaaa, a quién se le ocurre un disfraz de torero, nojoda, esto es una afrenta, a quién le gustaría verme a mí en un disfraz de torero, o a Manuel.

John Alejandro: No tanto eso, yo no me imagino a Manolo en un disfraz de torero, para eso hay que ser flaco, ni yo quepo en una vaina de esa.

John Bula: No qué hijuepueputa, yo no voy a pasar ese ridículo en la logia, yo con este barrigón no quepo en un disfraz de torero. Y en ese evento me toca hacer un discurso, y todo el mundo lo mira uno. Pero con un disfraz de torero no entro ni al auditorio. Voy a llamar a Manolo.

John Bula: Manolo, ya supiste lo del disfraz de torero?

Manolo: Si, mucho hp… yo no voy pa esa… Ya he ido a tres sitios, y me he medido como dos trajes, y toda esa licra me queda como vulgar.

John Bula: No, esto es inaudito, o me cambian esa vaina o hablo con el venerable, esto es una censura.

John Alejandro: es una burla, quién va a dar un discurso en disfraz de torero, me rehúso.

Manolo: John Alejandro, escuchaste mal, no es que tengamos que ir con un atuendo de torero, es que tenemos que ir con el atuendo de obreros a la logia. Y yo de marica por toda Barranquilla midiéndome disfraces de torero.

Timbra en la puerta de los Bula Carreño.

Era el señor Manuel disfrazado con un elegante traje de torero dorado con anaranjado fluorescente.

John Bula: Joda Manuel, y ese anaranjado.

Sr. Manuel: Usted sabe hermano John, que yo siempre estoy en servicio, y ando en alerta naranja.

 

CUANDO JOHN BULA DEFENDIO A LUCHO “EL BAJA PANTI.”

 

Luis Fernando Porras, un médico reconocido en la ciudad de Barranquilla, más conocido como “Lucho el baja panti”, ha sido acusado por su secretaria de acoso sexual.

Según la versión de la víctima, Lucho que estaba casado, en varias ocasiones la invitó a almorzar, y a tomar un café, luego de salir del trabajo. La Víctima, de nombre Angela López, dijo que el Dr. Porras la molestaba mucho con humor de doble sentido, y que a veces la incomodaba. Angela trabajaba con el Dr. Porras desde hace un año y medio, y dijo que en los últimos tres meses de su trabajo, había sido acosada por Lucho, quién incluso llegó a insinuar que iba a dejar a su esposa, si ella se iba a vivir con él.

Lucho el baja panti, ya había ido a la oficina de varios abogados, pero ninguno quiso coger su caso, pues con el apodo de “Lucho el baja pati”, era muy difícil armar una defensa por acoso sexual.

Lucho llega a la oficina del prestigioso abogado John Bula Fritz, quién estaba en una reunión previa:

John Bula: Luuuu ¿Cómo así que John Alejandro se quiere casar dos veces? Eso no se puede ante el derecho…  ¿Y Jessica no se quiere casar? ¿O es lo mismo en sentido contrario? ¿No? ya yo ni se Luuuu…. Yo a esos dos los veo como enredados…

Enilse: Jefe, ya llego el doctor Luis Porras.

John Bula: Ah sí, dile que siga, por favor, que ya lo atiendo. Luuu, te llamo luego que voy a atender un cliente.

 

John Bula: Dr. Porras ¿cómo está? Siéntese por favor.

Dr.Porras: Buenos días, Dr. Bula.

John Bula: Ya estuve viendo su carpeta, y veo el caso complicado…

Dr.Porras: Es que Dr. Ya me he reunido con varios abogados, y no quieren atenderme el caso, usted es mi última esperanza.

Jhon Bula: Es que Dr. Porras, es que estamos en un caso muy serio de acoso sexual, y usted con ese apodo… mire aquí está en la carpeta… “Alias Lucho el baja panti”, y la víctima también lo afirmó en su declaración.

Dr.Porras: Pero Dr. Bula, es que a mi me llaman así desde chiquito, los pelaos del barrio…

John Bula: Peor… si desde la niñez vienes con esas malas mañas.

Dr. Porras: No, Dr. Bula, déjeme explicarle. Es que de chiquito, yo me iba a trabajar con mi mamá que tenía una tienda de ropa muy elegante. Y un día, fue la mamá de un amigo del colegio, y él la estaba acompañando. Vea y esa señora comenzó a medirse como 10 vestidos, y cuando escogió uno, resulta que el vestido era como  transparente, y entonces, comenzó esa señora y mi mamá a buscar qué pantaleta pegaba con ese vestido. Y resulta que las pantaletas en el almacén estaban guardadas en el segundo piso, y mi mamá ya había subido una vez, y como me tenía a mí ayudándola, comenzó, lucho baja el panti rojo, lucho baja el panti blanco, lucho baja el panti con encaje, lucho baja el panti azul, y el amigo que estaba ahí, llegó al colegio con el cuento, y comenzaron a decirme lucho el baja panti.

John Bula: Bueno, ese es un buen dato, hay que llamar a declarar a ese amigo… pero ese apodo de la niñez, ¿ha durado tanto tiempo?

Dr. Porras: Es que Dr. Bula, hoy en día soy ginecólogo… y mis amigos me siguen jodiendo con ese apodo. Y fuera de eso, luego llegó el chiste del Torombolo, del Dr. Porras, y también me la montaron con eso.

John Bula: No, qué vaina tesa… usted lo que ha sido víctima del bulllying desde su niñez. Pero no se preocupe… vamos a coger el caso, solo que antes, necesito que vaya a donde la Dra. Johanna Bula, mi hija, que es experta en estos casos, con ella nos podemos preparar mejor.

 

En efecto, el Dr. Porras fue a la oficina de Johanna, y luego de 15 minutos, suena el celular de John Bula.

 

Johanna: ¿Se puede saber quién me mando ese médico acosador y depravado a mi oficina? ¿Cuál es la necesidad?

John Bula solo soltó la risa.

 

CONVERSASIONES ENTRE JOHANNA Y CAROLINA.

 

Previo a una sesión de fotos familiares, madre e hija se estaban maquillando.

 

Carolina: Mami, es que tu no me prestas atención.

Johanna: Carolina, Yo si te presto atención… Mira aquí tienes para que te maquilles, échate un poquito de polvo. ¿Y te vas a echar la pestañina?

Carolina: No, mami…

Pasa un minuto con una distracción…

 

Carolina: ¿Y cómo me lo hecho?

Johanna: Caro, échatela desde la raíz…

Carolina: Mami ¿Cuál raíz?

Johanna: Desde la raíz hasta la punta.

Carolina: ¿Mami cual raíz y cual punta?

Johanna: Caro, la pestañina se echa desde la raíz de la pestaña hasta la punta…

Carolina: Mami, pero si yo lo que me voy a echar es polvo… ¿Cómo me lo voy a echar en el ojo?

Johanna: Ah, yo pensé que te estabas echando la pestañina.

Carolina: Viste, es que tu no me paras bolas.

 

 

 

CONVERSACIONES ENTRE EL SR. MANUEL Y MANOLITO Y SUS CONSECUENCIAS.

 

Manolito: Abuelo, cágame.

Sr. Manuel: No mi hijito, ¿cómo se te ocurre que voy a hacer eso?

Manolito: Abuelo, caaagaamee

Sr. Manuel: No mi hijito, ¿como te voy a cagar? Si cuando yo voy al baño, Aida Rosa se sale del apartamento…

Manolo: ¿Qué pasó Mañetin?

Sr. Manuel: Que Manolito me dice que quiere que lo cague, y yo le digo, que no, que ni tu mamá me aguanta, ahora él sí que menos.

Manolito: Abuelo, caaagaameee.

Sr. Manuel: Se da cuenta Manolo…

Manolo: No papá… Manolito te esta diciendo que lo cargues…

Sr. Manuel: Ah caramba, claro que sí mi hijito, yo te cargo. Uy pero como pesa este muchacho…

 

Tres días después…

 

Jessica: Manolo, Manolito necesita ir urgente al baño.

Manolo: Vamos a donde mis papás que queda más cerca.

 

Llegan a la casa del señor Manuel, Manolito le abren la puerta y va corriendo.

 

Manolito: Abuelo, vamos cárgame…

Sr. Manuel: Claro que sí mi hijito hoy si te cargo… (lo cargó y lo apretó con un abrazo)

Manolo: Papá, ¿Qué estás haciendo si Manolito necesitaba ir urgente al baño?

Sr. Manuel: Pero Manolo si el niño me dijo: Abuelo, vamos cárgame.

Manolo: No, Mañetín… Manolito te dijo: Abuelo, voy cagandome¡

Sr. Manuel: Oh por Dios¡ Ahora sí entendí… pobre muchacho.

Jessica: ¿Qué pasó? ¿Alcanzó Manolito a llegar al baño?

Manolo: Nojoda Mañetín, estás jodido, tras que el pelao venía corriendo para el baño, tu lo cargas y lo aprietas.

Aida: Uyyy por Dios ¿a qué huele?

Sr. Manuel: Manolito, pero que manera… eso no va acorde con una persona de tu tamaño… Aida Rosa, urgente ayúdame ¿Dónde está Aida Rosa?

Jessica: Ya se fugó…

Sr. Manuel: Pero esto es peor que un siniestro naval, hay que llamar al ajustador, al charteador, a los bomberos… Manolo hay que comprarle un seguro a Manolito, esto produce daños y perjuicios…, mire cómo quedaron mis tenis, estos tenis tienen un color exclusivo, este Naranjado no lo tiene nadie… y no me los voy a volver a poner, por lo que veo…

Manolo: Papá si tu fuiste el que ocasionó este accidente, cómo se te ocurre cargar a Manolito y apretarlo así… cuando el pobrecito venía para el baño… estalló como un guineo maduro…

 

EL LLAMADO JUICIO: “TODOS QUIEREN CON MI CHIQUITO”

 

Suena el celular del señor Pedro con la siguiente canción.

https://www.youtube.com/watch?v=pBn5g314d5g

Don Pedro: ¿Dana cuando me le vas a quitar es sonido maricón al celular? Ese tuvo que ser John Bula, que me puso esa cancioncita maricona.

….

Johnny: Hola viejo ¿cómo está?

Don Pedro: Bien mi hijo, ahí mejorando.

Johnny: Viejo, ¿cuál fue ese mierdero con John Bula? que me llamó Pedro Alonso a contarme, pero como cosa rara solo le entendí la mitad de lo que me dijo.

Don Pedro: ¿Cuál de todos mijo?

Johnny: El del juicio…

Don Pedro: A sí,… Magínese mijo, que el día del padre, yo estaba recién salido de la clínica, y en la reunión que hicimos en la casa, yo les decía a todos. Que qué alivio haber salido de la clínica, que no hay como estar uno en su casa, que eso era una cosa que no se la deseaba a nadie, y de pronto dije: “Allá en la clínica, me clavaban tres veces al día, todos los días”

(comentario al margen de John Alejandro; “mmm Abuelo, eso sonó raro, ¿Cómo perdió el año de esa manera?”)

Pa’ que fue eso mijo… a la semana me llamó Jorge Carreño y Pedro Alonso, que yo ¿porqué había denunciado a los médicos, por violación? Y yo extrañado… yo no he hecho eso… que eso era mentira... Y Pedro Alonso, me dijo, papá, aquí hay una denuncia por violación, que a ti te habían violado en el hospital… Y yo le dije que eso no era así y le colgué…

A la semana llegaron a la casa, unos médicos de medicina legal, disque a examinarme a ver cómo había sido la violación… y yo les dije que estaban locos… y que se fueran…

A los tres días fui yo al negocio, y la gente no me preguntaba “¿Don Pedro cómo se siente?” sino “¿Don Pedro, cómo se sienta todavía?” No qué hijueputa piedra cogí con esa vaina.

Pero eso no es nada mijo, por ahí me pasaron un panfleto, que decía: “Todos quieren con mi chiquito” y salía mi foto... Ahí si ya me enojé y decidí averiguar bien que era lo que estaba pasando y llamé a Pedro Alonso para que me explicara. Pedro Alonso, me dijo, que había una denuncia penal firmada por John Bula, que decía que a mí me habían violado en la clínica del caribe tres veces por día. Y yo dije, yo no he puesto ninguna denuncia, ni le he dado poder a John Bula para eso, además que eso se debe a un mal entendido… Luego me explicaron que en caso de una violación, no era necesario otorgar poder para denunciar.

Bueno, decidí irme a Caldemar para que me asesoraran y me recibió el viejo Manuel Calderon, a quién le conté la situación, al principio no me entendió el tema:

 

Don Pedro: Es que el día del padre, yo dije que en la clínica del caribe me clavaban tres veces al día, todos los días…

Don Manuel: Uy qué barbaridad…, pobre hombre… en todo caso… yo me voy a mandar a revisar… porque yo también estuve hospitalizado en esa misma clínica… y no vaya a ser….

Don Pedro: No hombre… cómo se le ocurre… Yo lo que quería decir, es que me inyectaban tres veces al día, pero John Bula se aprovechó del doble sentido de mi frase, y presentó una denuncia penal en contra de los médicos de la clínica… y además me ha mandado estos panfletos, mírelo “Que todos quieren con mi chiquito”.

Don Manuel: Aaaaah, y hasta bonito que quedaron, parece título de película porno… Pero bueno, ahora sí, no se preocupe, que aquí también vamos a actuar y vamos a presentar una denuncia por injuria…

 

Y en efecto mijo, Caldemar, presentó la denuncia por injuria, por imputaciones deshonrosas… Entonces me llamaron a la audiencia y me vi frente a frente con John Bula… Pero mijo… me fue mal… terrible

Johnny: Y por qué viejo ¿qué te pasó?

Don Pedro: A mí me dieron la palabra… y yo expliqué todo lo que te acabo de decir… Pero luego le dieron la palabra a John Bula, y mejor dicho… Qué desastre… Resulta que John Bula, solicitó interrogarme, y la primera pregunta fue:

John Bula: Diga si es cierto, que usted en una reunión familiar el día del padre dijo que en la Clínica lo clavaban tres veces por día.

Johnny: Y tu ¿qué contestaste viejo?

Don Pedro: Pero qué más iba a contestar si estaba bajo la gravedad de juramento… Pues que sí, que sí lo había dicho.  Después, llegó y me preguntó:

John Bula: Como nos dijo anteriormente, que lo clavaban tres veces al día… ¿nos puede decir si era la misma persona o eran varias?

Don Pedro: Y yo contesté… Pues claro eran varias, casi siempre no eran los mismos médicos cada día…

Johnny: Pero papá… ¿Cómo contestaste eso?

Don Pedro: Pero mijo, yo que más iba a contestar, yo solo veía a John Bula de frente y riéndose, mientras que mi abogado el señor Manuel se tapaba la cara… como de la vergüenza… y luego llega John Bula y me remató con otra pregunta:

John Bula: Don Pedro, y puede decirnos si ¿cada vez que lo clavaban sentía dolor?

Don Pedro: Y yo de ingenuo conteste: “Pues en la mayoría de los casos sí, pero en algunos, habían unos médicos que tenían buena mano…” Luego escuché desde el público el chiflido del hp de Hari, y además me gritó: “pártete galleta”. Vea mijo eso sí me dolió, me sentí traicionado….

Johnny: Pero papá, ¿Cómo vas a contestar eso?

Don Pedro: Vea mijo a mi no me explicaron nada, y yo contesté lo que me estaban preguntando… y estaba bajo la gravedad de juramento. Pero eso no fue lo peor, luego John Bula, salió con un discurso sobre la desfloración anal como consecuencia de la violación, y de que yo con los medicamentos no estaba en mis cinco sentidos, y dele con la desfloración anal, y dele con la desfloración anal, John Bula  duró como media hora hablando de esa vaina, y hasta bonito le quedó el discurso, incluso citó a un tratadista alemán:

“Y como bien lo dijo el gran tratadista alemán Michael Schumacher (que más que tratadista fue un famoso corredor de autos): “El que pega por atrás… paga”

Vea mijo, ese hombre hablaba con tal convencimiento, que yo casi me voy para al baño a revisarme el culo, a ver si tenía una desfloración anal... Pero mijo, eso no fue lo peor aún, lo peor fue cuando se le dio por solicitar una prueba, y dijo:

“Y solicito a este magnánimo juez, que ordene como prueba un examen de medicina legal, en donde se revise si el señor Pedro Carreño tiene o no desfloración anal, y yo cómo primer interesado y acusado en este proceso, solicito estar presente en la práctica de esa prueba…”

Johnny: Nojoda, qué hp, y tú ¿Qué hiciste?

Don Pedro: Pues mijo, yo qué iba a hacer, no me iba a pelar el culo ante ese poco de doctores, y mucho menos frente a John Bula, así que hice tres cosas: la primera, despedí a mi abogado… la segunda, retiré la denuncia, que en palabras de los abogados, lo que hice  fue un desistimiento para no seguir el proceso… y tercero, le metí una insultada al John Bula, que hizo que el juez me multara, y me hicieran pagarle los daños y perjuicios a John Bula por haberlo insultado… pero eso sí valió la pena.

Johnny: Nojoda…. Viejo y ¿qué le dijiste si se puede saber?

Don Pedro: Que se fuera a una iglesia y que se automadriara por dos horas seguidas, a ver si así se le quitaba lo hijodeputa…

 

EL CANTO DE AGATHA

 

Agatha:

La vaca lola, la vaca lola,

Le gusta el chupeteo cuando se enamora…

La vaca lola, la vaca lola,

Le gusta el chupeteo cuando se enamora…

 

Jessica: Ve Manolo, ¿qué es lo que está cantando la niña?

Manolo: Ve… no sé, la estaba oyendo… pero no le había parado bola…

Jessica: Pero Manolo… si la tienes de frente… ¿cómo es que no le has parado bola?

Manolo: no en serio mi amor, la estaba escuchando pero no le estaba poniendo atención…

 

Agatha:

La vaca lola, la vaca lola,

Le gusta el chupeteo cuando se enamora…

La vaca lola, la vaca lola,

Le gusta el chupeteo cuando se enamora…

 

Manolo: Ve, qué curioso ¿quién le habrá enseñado esa versión?

Jessica: Ay, Manolo… ¿quién más? María Camila, qué fue lo que le enseñaste ahora a la niña…

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Una receta para el corazón de mamá

  Una receta para el corazón de mamá. En el programa de Manolo, estamos aquí transmitiendo desde la casa Vargas Bula, una receta para el cor...