LAS VAINAS DEL CHINO

Las vainas del chino.

En ese extraño pensamiento del Chino, le pasaron cosas muy parecidas a las canciones del Dolcey.

En una ocasión un señor de una ferretería lo corretio dos cuadras con la firme intención de pegarle porque porque al Chino se le dañó una maquina, y para arreglarla tenía que conseguir un repuesto que era una Chupa. Digamos que el señor que lo atendió en la ferretería era Luchino, y llega el Chino a pedir el repuesto y le dice: señor, tiene este repuesto? Mire aquí traigo la muestra. Luchino contesta, si claro, aquí la tenemos. Y el chino llega y le pregunta: ahora así, hablemos de lo importante... A CÓMO LA CHUPA? Y por más que corrió dos cuadras Luchino lo alcanzó y bueno... Pobre chino.

Cómo todo caballero repite, el chino volvió a la misma farmacia, y lo volvió a atender Luchino. 

Luchino:Otra vez tu? 

Chino: quien más? Vea como son las cosas y para que veas que no te guardo rencor, vine a comprarte otra vez. 

Luchino: y que quieres ahora? 

Chino: un medicamento que se llama QUENAL. 

Luchino: en jarabe o en gotas? 

Chino: dejame y reviso... QUENAL GOTAS. 

Y vuelve el chino a correr, pero esta vez si no lo alcanzaron. 

En una ocasión en cerro seco el chino contrato a un asistente venezolano, al que por sus rasgos y apariencia, le apodaban chita. En una ocasión, el estaba escribiendo un guión para un video, y se le cayó el lápiz, y llamó a su asistente para que lo ayudara, y en vez de decir Chita cogeme el lápiz que se me cayó, dijo en su extraña forma de hablar COGEMEL LAPIZCHITA... QUE SE ME CAYO, frase que escucharon Polo y Socarras qué iban pasando por ahi: Polo: oíste? Te dije que no eran cosas mías... El chino y el Veneco tienen algo. Socarras: ya escribo al grupo.

En otra ocasión los magníficos, Ramiro, Anibal y Yesid fueron a cerro seco y armaron un verguero hasta tiros hubo. El chino ya acostumbrado a las extorsiones, amenazas y presiones de bandas del sector, entre ellas, de Alias Kun Fu Panda, ya tiene un buen amigo policia en la estación de nombre John Peter Chacin, a quien llamo, nuevamente con su especial forma de hablar, en una llamada que quedo grabada y monitoriada, con mensaje de urgencia y desespero: Mi Poli... MI POLI JOHN,  SI MI POLIJOHN LLEGUE... LLEGUE RÁPIDO... QUE LO NECESITO URGENTE... QUE SE ARMÓ UN VERGUERO AQUÍ EN CERRO SECO. 

El Toño que iba pasando por ahí dijo enseguida: EL chino si es marica. 

Y Polo replicó: Póngale la firma.